Empieza la cuenta atrás para las vacaciones. Estoy totalmente preparada para que a partir de hoy cualquier cosa que pueda atrasarse lo haga. Surgan impedimentos variados. Falle lo infalible. Y en fin, Murphy con sus castas haga acto de presencia. Probablemente, al estar preparada para lo que pueda ocurrir, ocurrirán menos cosas. Eso también forma parte del principio de "Murphy".
Parece ser que solo el 2% de la población española hacemos listas para no olvidar nada en casa antes de salir de vacaciones.. El olvido en mi familia es una enfermedad con nombre y apellido así que el temor de que algún día recaiga sobre mí me incita a ejercitar la memoria.
Recordando hoy el ayer me he parado en la playa de Puente Romano. Cualquier parecido con ayer, es mera coincidencia.
El antiguo chiringuito se esconde entre cañas, telas y plantas. No se ve pero existe. Si miro con atención puedo verlo abierto. Sus sillas rojas y las mesas de madera. La luz que se colaba por el techo de brezo formando pequeños hilos brillantes en las cabezas de la gente. Las lamparas de barro color azul. El calendario de Coca Cola desvaído y siempre el mismo detenido en un 1.9 algo. La música casi siempre era de Frank Sinatra, creo que solo tenían dos cintas. O al menos yo solo recuerdo a Sinatra y Bambino. La radio ruidosa que ponía color al ambiente casi toda la jornada. Las partidas de Backgamon, siempre jugaba con fichas verdes. Y la gente. Era gente muy especial, con la que solo nos relacionabamos en verano. Eran tan variopintos e interesantes que estoy segura que pocos me creeríais si os contase mas de una historia. Conocí por entonces, desde príncipes hasta estafadores, damas y putas, buenos y malos, trabajadores y flojos, guapisimos y horrorosos, escritores, actores, actrices, pintores, músicos, cantantes, políticos etc etc etc.
Fue una época singular. Despertaba al mundo esta ciudad y crecíamos juntas. Así fue hasta que en algún momento ella dio un estirón y yo me quede pequeña.
Quizás por ello, por lo vivido entonces, no me gustan los faustos desde la época gil. Carecen de elegancia, de aire cosmopolita. Opulencia y nada mas.
7 comentarios:
Mi Amiga querida,
¡Qué bien describes esas tardes de antaño, en ese chiringuito de tus recuerdos!
Me ha encantado ese anuncio raído de Coca Cola, que marca aún la hora de un tiempo que llegó para quedarse...
Y las dos únicas canciones que impregnaban los corazones de los asistentes... personajes con historia propia tras de sí :-)
Gracias mi Amiga hermosa.
Que sigas disfrutando cada minutos de estos días.
Un beso y un abrazo grandes.
Me pasó como Angélica me encantó como describiste el chiringuito con el antiguo anuncio de Coca-cola, las dos cintas de música, hubiera ido de cabeza, eso sí, cuando no hubiera nadie.
Un beso.
En esos chiringuitos donde todos tienen cabida es donde realmente se palpa la vida, como la que se lee de tus letras.
Un abrazo
Quizás soy un intruso, y que debía de pedir permiso antes de entrar en tublog.
Hace meses que te veo en el blog de Angélica y hoy he decidido visitarte. Esto que cuentas del chiringuito, me es familiar este ambiente de playa, por que yo lo viví muchos años antes de emigrar a Barcelona.( En La Barrosa )
Me gusta tu blog y me encanta Marbella y toda Andalucía.
Te invito a subir a mi Colina de Sueños cuando te apetezca.
Saludos.Antonio
La ley de murphy falla si eres consciente de que puede ocurrir. Disfruta....en serio....te lo merces.
Me alegro que os guste el chiringuito de mis recuerdos. El tiempo transcurrido le pone una manto de belleza que quizas no capte en su día.
Doy la bienvenida a DONCEL, Antonio y de intruso nada. Suelo recibir con mucho agrado las visitas de nuevos paseantes.
El blog de DONCEL tiene preciosas fotos y habla de Cadiz, merece la pena pasear por su COLINA DE SUEÑOS.
Buen fin de semana a todos, me voy a la playa
Lo describes tan bien...y si, tienes razón nada parecido con la realidad. Disfruta de tus vacaciones...
Un beso
Publicar un comentario