Días atrás leí a un pomposo escritor que se precia de su rica prosa del cual no daré nombre porque me cae mal y no me gusta su temática ni prepotencia en su forma de expresar. Me molestaba su critica sobre los lectores de hoy. Pretendía el buen señor que todo hijo de vecino para ser un buen lector sea capaz de leer (no habló de comprender) a escritores de gran profundidad literaria o cultural. Despreciaba con placer a lectores tipo best seller y grandes relatos condenándolos al mundo de los idiotas. Para mi, un lector siempre sera un lector y leerá acorde a sus gustos,conocimientos y oportunidades.
Que manía con generalizar y banalizar con cuestiones que tanto trabajo cuesta que prosperen. Una persona que lee no pelea. Una persona que lee es interesante. Si las condiciones le son favorables con cada libro que lea irá subiendo el nivel de sus lecturas. O incluso especializarse en ciertos autores y ser hasta critico con lo que lee. Se puede ser lector de novelas de amor de Corín Tellado o de Shakespeare, eso no cambia la condición de lector. Aunque lo fantástico y lo ideal es que a todos nos gustase Huxley o Balzac, el magnifico Cortazar o mi querido Garcia Marquez por poner un ejemplo. E incluso la capacidad y nivel educativo para entenderlos, pero la realidad es otra. Como siempre digo para gustos los colores y esta muy mal generalizar sin profundizar en lo que se dice. Sobre todo cuando uno es escritor que cobra por escribir en periódicos de gran tirada y tiene todo el tiempo del mundo para escribir.
Como siempre no tengo el tiempo suficiente como para profundizar a fondo sobre el tema. Simplemente quería dejar aquí un apunte sobre el alienado escritor.
Aunque me gustaría conocer vuestra opinión.
Por cierto leo a Antonio Rodriguez Almodovar en "Si el corazón pensara". Visión agridulce y llena de sorna de los años 50 en España. Ambientada en Sevilla, cuenta una curiosa historia que hace un recorrido por la sociedad de la época. Fantástico el tamaño de la letra en la edición de Alianza Editorial. Sus 47o paginas no dejan indiferente a nadie e incluso arranca sonrisas y a veces carcajadas. Recomendable a los que gusten leer sobre la memoria histórica.