viernes, julio 18, 2008

Variedad literaria


Una invitación a comer me coge de improviso a media semana. La compañia agradable y la conversación interesante hacen que baje la guardia con la comida y la bebida sin haberme repuesto de la ultima vez. Cuando quiero parar ya es tarde y recaigo. Apenas pude salir de casa en unos días asi que entre desganas y molestias me dedique a leer.



Termino la novela "Boca Sellada" de S. Angnello Hornby. Historia de un secreto familiar que perdura a lo largo de los años e influye aun siendo secreto en la vida y desarrollo de los protagonistas. Como siempre, la siciliana escribe con gran maestria ambientandonos en la vida cotidiana de Sicilia con un lenguaje enriquecedor lleno de pequeños matices.



Novela facil de leer; aprecio especialmente sus dialogos y descripciones.

Termino de leer "El ultimo chef chino" de Nicole Mones.

Sorprendente novela ambientada en nuestros días que alimenta de un tirón la mente, el estomago y el espiritu.

Recomiendo en especial las descripciones de banquetes, recetas, olores y sabores. Aunque tras leer el libro, si alguna vez piso China, tendré mucho cuidado con lo que me meto en la boca. Me llama la atención la cuidada narrativa de que hace gala la novela aunque en el fondo no deja de ser una bonita historia de amor entre los protagonistas. Recomendada a glotones y a todos los que comen mas con los ojos que con la boca.

Por ultimo empecé a leer una curiosa novela escrita por un amigo. Me la regaló con una bonita dedicatoria y la advertencia de que esperaria con ganas mi opinión sobre ella.

En literatura como en la vida para gustos los colores, así que la advertencia no me hizo mucha gracia. Una cosa es opinar de la obra de un extraño y otra de la de un amigo. Una vez convencida de que lo mejor era ponerme a ello y con cierto grado de curiosidad, abrí "T4........ a los 54" de Javier Gil de Sagredo.

Confieso que la tematica aunque manida, el descubrimiento del sentido de la propia existencia y logros personales, estaba planteada con ciertos ribetes de aventura que la hacian novedosa.

Se deja leer aunque redunda en topicos y topicazos. El fondo es bueno pero la forma insidiosa en su vocabulario y formalidad. Le falta soltura y frescura y por que no, naturalidad en la expresión. Resultan poco creibles los discursos con que se apuñalan los protagonistas a la orilla del mar en plena Polinesia Francesa. Sin embargo y dado que es su primera novela y todo un ejercicio de desnudo espiritual y mental persisto en acabarla. Creo que Javier ha querido desplegar ante los ojos del lector todo un submundo que yace en cada uno de nosotros hirviendo sin parar sin que la mayoria de las veces hagamos caso a ese extraño fuego que nos domina por dentro hasta que es demasiado tarde para apagarlo.

Halago su valentia en cuanto a lo que supone escribir un libro y que sea publicado. Mas de uno le juzgara a traves de sus protagonistas, queriendose ver en algunos de los que describe aunque eso solo haya sido un truco literario. Su oponente en la novela, su Ying, su otro lado del espejo, me resulta un personaje conmovedor y creible, muy a tono con los tiempos que nos ha tocado vivir.

Enrique, verdadero vehiculo conductor de la trama, se me queda un poco en el aire en cuanto a que ofrece mucha información general y poca particular. En definitiva,lo que mas echo en falta es cierta dosis de poesia y un mayor grado de ambientación. Aunque recomiendo su lectura a lectores entregados y a mayores de 54, ellos la captaran enseguida.


Por ultimo me encierro con Eduardo Mendoza y su novela "El asombroso viaje de Pomponio Flato", creo que hasta los vecinos me oyen reir de lo que la estoy disfrutando.
Buen día a todos
Musica: Amy Winehouse -You Know I'm No Good From: gummmo

4 comentarios:

TORO SALVAJE dijo...

Que bueno, tengo ese libro de Mendoza esperándome a que acabe el que estoy leyendo.

Ya me relamo.

Besos.

Reina Letizia dijo...

Yo sigo leyendo a Larra. Es lo mejor que ha dado España en literatura para una princesa.

Besos de Princesa

Unknown dijo...

que chula la foto de la ventana. Mujer, que te pille por sorpresa una comida de esas que estás tan agusto, no es delito... por lo menos no es uno grave.

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

Me voy de vacaciones, las necesito como el comer.
Gracias por haberme leído en mis blogs, por tus palabras, por haberme motivado, por estar ahí.
Un abrazo y en septiembre nos veremos