viernes, junio 10, 2005

DIA DE PLAYA

Como lo de la feria no me sienta bien, decidi irme a la playa. Fue una buena decisión ya que apenas habia nadie y pude relajarme al sol. Frente a mi, una pareja totalmente tatuados
se encremaban uno al otro en las tumbonas. Durante un rato me entretuve mirando sus carnes tatuadas, preguntándome que encuentra la gente en pintarse espantos en la piel. Digo espantos porque la chica llevaba tatuados una especie de monstruos verdes y rojos y el chico lo mismo solo que en azules y amarillos. Me amodorre al sol muy gratamente con el libro de Ramon Buenaventura "El ultimo negro" entre los brazos. Me gusta el libro, aunque confieso que algunas partes se me hace duro de entender por lo rico del vocabulario, el mio es corrientito.

Me comi un espeto de sardinas (para el que no lo sepa, los espetos consisten en asar sardinas pinchadas ó espetadas en una caña sobre un fuego en la arena) deliciosos, acompañado de dos cervecitas que me pusieron muy dispuesta a volver a la tumbona y al ardiente sol de las 4 de la tarde en Marbella. Nada mas poner la cabeza en la toalla caí en los brazos de Morfeo arrullada por las olas y no soñe, si lo hice, no lo recorde al despertar.

Una vez cumplido el ritual de la siesta, me dí un baño en el mar y volví a recrearme en la lectura de Buenaventura hasta cerca de las ocho. Volviendo a mi casa, no deje de tropezarme con mujeres vestidas de faralaes que aguantaban el tipo a duras penas, hartas de vino y bailes. Nos mirabamos como si perteneciesemos a diferentes sectas: Ellas, las normales; Yo, la abducida.

Y es que no esta bien visto que no te enloquezca la feria, ni los trajes de gitana, ni las borracheras "arrastras".

1 comentario:

Anónimo dijo...

Dos cosas en que coincido contigo: leí el último negro, aunque me decepcionó un poco. Y la otra que huyo de la feria de mi pueblo, creo que lo mejor que tiene es que cuando terminas de recorrerla te topas con el mar de frente. Besitos.