jueves, enero 19, 2006




Siguiendo las huellas sobre la arena se llega a este bicho. Es increible la calidad de las esculturas de arena, éste dragón ó lo que sea, no es nada comparado con otras que he visto. Claro que entonces no llevaba la cámara encima. Un bicho como este es el que tiene mi pueblo en su interior. Un bicho, que nos va dejando sin negocios, sin zonas verdes, sin ilusión y casi sin fuerzas.

Quizas, como en los cuentos, necesitemos el caballero ó caballeros de la armadura blanca para desterrar el bicho ( no me gusta matar ni creo que sea bueno). Necesitamos gente nueva, ganas de trabajar, honradez, cierto grado de sabiduria (tan poco mucho que luego pasa lo que pasa) y un toque de relaciones publicas de alto nivel. Lo demas lo pone la belleza del pueblo y su buena gente. Puede pasar que el bicho se vaya a otros lares sin más; más seguro que deja sus huevos muy bien colocados. Me pregunto quien seria bueno para mi pueblo, no encuentro la respuesta, a mi pesar.

1 comentario:

Stifmeister dijo...

Hoy he visto el partido de baloncesto Unicaja-Fórum. Hablaba el comentarista de un jugador del equipo malagueño y decía: "Es jienés, pero con residencia habitual en Marbella. Tiene esa suerte". Para que veas que no siempre la visión de los medios sobre Marbella es negativa.